Tienes una cartera de productos, bases de datos de clientes y el mejor precio del mercado. Has decidido explorar el increible mundo de la venta online. ¡Enhorabuena! Dentro de poco habrás conseguido abaratar tus costes de distribuicón y tendrás un punto de venta que te permitirá alcanzar a todo el planeta, pero, siento decepcionarte, te queda algo de trabajo antes de contratar a un desarrollador Web.
Hay una serie de materiales complementarios que todo propietario debe de tener claros antes de tomar la decisión de abrir su tienda online.
Vayamos paso a paso, hagamos el recorrido que va a hacer tu cliente para ver todo lo que te falta:
1.- Política de cookies
Paso uno, el cliente accede a tu Web, obviamente quieres saber lo que compra, qué páginas visita y cómo se comporta. Para ello hemos insertado unas cookies de seguimiento. Es decir, le estamos espiando. Aunque espiar quizás no sea el mejor termino, la verdad es que estamos recopilando datos y debemos de hacerselo saber. Por eso necesitas insertar un aviso de cookies con un texto explicativo indicando para qué se usa cada cookie.
Echa un vistazo a éste enlace para saber más sobre las cookies y su uso
2.- Acuerdo con empresa logística
El cliente ya está dentro, ha añadido varios productos a su carrito, y ahora desea hacer el checkout.
Para poder cerrar la factura de venta, y si el producto es un bien material, tu cliente querrá saber cuanto cuesta que le entregues el producto en su casa. Es decir, el precio de los portes.
¿Tienes ya un proveedor para envíos? Hoy en día la mayor parte de empresas de reparto tienen tarifas específicas para tiendas online. De hecho, hasta puedes tener diferentes proveedores para conseguir la mejor tarifa en cada caso y dar un valor añadido a tu cliente.
Algunos proveedores te ofrecerán una tarifa reducida, otros incluirán códigos de seguimiento, y los mejores te permitirán integrar el seguimiento en tu propia tienda.
Ten en cuenta que tradicionalmente los portes se calculan teniendo en cuenta el peso y volumen del paquete así como la distancia desde el punto de envío al de entrega.
Así que además de conseguir un proveedor para envíos, vas a necesitar tener las medidas y pesos de los paquetes en los que entregas tus productos para automatizar el sistema de presupuestos.
3.- Pasarela de pago
En el siguiente paso, el usuario querrá pagar por su pedido. Cuantas más opciones de pago proporcionemos más fácil será que la gente nos compre. Entre las formas típicas de pago encontramos la transferencia (necesitarás una cuenta corriente), tarjeta de crédito (para lo que se hace necesario una pasarela de pago) o contrarreembolso. Hay más, pero por ser breve se explican en otro post.
Vamos a centrarnos en las pasarelas de pago. Las pasarelas de pago son sistemas que nos permiten cobrar directamente a la tarjeta, como hace un datáfono.
Como para los datáfonos, podemos encontrar varios proveedores, desde PayPal, el más común, hasta una pasarela proporcionada por tu banco.
Dependiendo del proveedor, se nos cobrará una comisión u otra sobre la venta por tramitar el cobro.
Con PayPal sólo tienes que darte de alta, pero siempre es recomendable usar una pasarela bancaria, que cargará una comisión inferior. Para poder usarla necesitas hablar con tu banco y que te proporiconen unas ‘claves de comercio’ únicas.
4.- Condiciones de servicio
Bien, tu cliente está a punto de darte dinero, pero antes, tanto por profesionalidad como por legalidad, tienen que estar de acuerdo con nuestras condiciones de servicio.
Las condiciones de servicio aclaran los posibles conflictos referentes a cambios o devoluciones, plazos de entrega, formas de pago o garantías.
Éstas deben de ser accesibles desde un enlace presente en todas las páginas y aceptadas en el proceso de compra mediante un formulario.
Normalmente desde desarrollo Web podemos proporcionar un borrador tipo, pero es mejor que cuentes con un abogado que sepa traducir tu forma de trabajo a un contrato. Al final cada empresa es un mundo y por ahorrar trabajo haciendo un copia y pega de otra Web nos podemos meter en problemas. Primero por no poder satisfacer dichas condiciones u omitir algún punto, y segundo porque el plagio es ilegal.
Bueno, pues esto es todo , ¿no?
5.- Inscripción bases de datos (LOPD)
La verdad que no… En éste último paso tu cliente te está proporcionado datos personales, su nombre, dirección, email, teléfono, y dependiendo de lo que vendas, hasta datos médicos.
En virtud de la Ley Orgánica 15/1999, de 13 de diciembre, de protección de datos de carácter personal, tienes que comunicarle al usuario qué datos vas a guardar y para qué.
Además, debes de inscribir tus ficheros (bases de datos), en el registro oficial, y enviar las actualizaciones cada vez que se produzcan.
Para ello, muchas empresas como la nuestra cuentan con su propio servicio de inscripción, pero si tus desarrolladores no te ofrecen el servicio, deberías de buscar un proveedor y aclarar éste punto antes de poner nada en marcha.
Ahora sí, tu tienda online cumple con la legalidad y puedes empezar a vender de forma segura.
Otros materiales que te ayudarán a abatar costes de producción y que puedes preparar antes de pedir presupuestos son:
- Imagenes promocionales de la tienda, como banners o llamadas a la acción.
- Listado de productos, en excel a ser posible, con descripción, precio, identificador (EAN o SKU), peso y medidas del paquete, y fotos (las fotos aparte, en la mejor resolución que puedas).
- Listado de categorías de tu tienda, con fotos y descripciones.
- Certificado de seguridad, no es necesario, pero da confianza a tus clientes.
- Textos sobre la empresa y el equipo.
En resumen no es mucho, son materiales que se pueden conseguir con unas pocas llamadas y que te van a ahorrar tiempo en producción una vez pongas en marcha el desarrollo de tu Web.